Pensamientos positivos

Hola

Me gustaría saber que tipo de pensamientos positivos os decís a vosotros misms para no caer en un maldito estado pesimista y depresivo, supongo que sabeis, que solemos caer en pensamientos trampa tipo "soy idiota" y cosas así.
¿Cómo luchar contra ello?
¿Alguien aquí tiene un método? ¿Un pensamiento positivo para hacer frente a todo eso? ¿Algo que le haya funcionado?

Gracias.

-Nadie piensa tanto en mí como yo creo.
-Que yo solo insulte o actúe molesto cuando odio a alguien a muerte no quiere decir que los demás sean igual. Esa persona que ha dicho algo malo de mí quizás no esté tan tan cabreada.
-La gente perdona más cosas de las que crees.
-Ser amable contigo mismo a lo largo de mucho tiempo tiene un efecto tremendamente positivo.

¿Pensamientos positivos? Eso no existe.

lo que suelo hacer siempre es pensar que todo podría ser peor, y trato de buscar la parte positiva de todo

Pienso que no todo el mundo es malo.

A mí los pensamentos positivos no me sirven de mucho. Es una cosa muy rara,como si sintiese que son una mentira. Por poner un ejemplo es como si yo soy morena y me repito constantemente "soy rubia,soy rubia,soy rubia"

Siempre dicen que siendo positivo las cosas irán mejor o te saldrán mejor por no ir con pensamientos negativos o catastróficos,pero como he dicho antes,no consigo asumir ese tipo de pensamientos y pienso que no surten efecto alguno. (En mi caso)

Me pasaba igual cuando empecé con terapia, y es un árbol que tienes que talar a base de muchos hachazos. Me llevó más de un año empezar a creerme mi interpretación buenista de cómo me trataba la gente, pero una vez se activa dejas de ver malas intenciones en todas partes y pasas a ver más neutralidad o amabilidad.

Yo lo que hago es tratar de analizar mi situación con calma, tranquilidad y objetividad. Fallas en esto pero, ¿en qué otras cosas aciertas y hasta puedes ser mejor que los demás? ¿Que has sacado en claro de esta experiencia negativa?

Ultimamente no ando tan positivo como antes, pero lo que suelo hacer es convencerme de que si no empiezo a moverme en alguna dirección, los horizontes no se van a ampliar, es decir, van a seguir siendo los mismos que me permiten ver estas cuatro paredes y mis hábitos repetitivos de todos los días. Pero es que ultimamente me cuesta mucho poner un poquito de voluntad..

Yo sé muy bien lo que cuesta abandonar tu zona de confort. Según el caso, hasta sientes miedo y caes en el auto sabotaje. Buscas cualquier excusa para abandonar tu nuevo proyecto y regresar a esa burbuja que echas de menos y donde te encontrabas a gusto. Confieso que yo he caído en eso más de una vez y así me ha ido en la vida.

Yo me pongo a pensar en las veces en que creía que algo iba a ser un desastre y que finalmente las cosas salieron mucho mejor y todo el sufrimiento anterior fue innecesario. Eso me ayuda a no sabotear todo como solía hacer.
Es como pensar "tengo pruebas de que esto puede salir bien".

Yo lo hago más simple. Me digo a mí mismo: "O te espabilas, o te pudres".

Pensar positivamente no creo se trate de buscar pensar lo contrario a lo que comúnmente podamos ocupar en nuestra cabeza, sino más bien entender y aprender a contrarrestar aquellos pensamientos que podamos tener negativos y nos afecten a la hora de desenvolvernos

Dependiendo de aquello que queramos modificar de nuestra forma de pensar quizá podamos establecer ciertos criterios o bases que definan la forma en la que queremos cambiar nuestras ideas

Por ejemplo: Si tras un mal suceso empezamos a pensar que "debemos estar bien" quizá más que ayudarnos a nosotros mismos nos añadamos presión al ser conscientes que, bajo éste pretexto, no conseguimos encontrar ese bienestar que deseamos

En vez de pensar que "debemos estar bien" podría ser más conveniente ser algo más permisivo/a con nosotros/as mismos, de forma que podamos pensar algo así como "no estoy pasando por un buen momento, pero tarde o temprano se irá pasando y tengo la posibilidad de ayudarme a mí mismo/a con ello"

La forma de enfocarlo si bien es semejante a su vez es distinta, y convertimos algo que de primeras veíamos como una "exigencia" en un progreso, en un ámbito que permita (sin castigos personales, sin presiones ni juicios críticos) transformar nuestro comportamiento y nuestra forma de procesar aquellos problemas que puedan afectarnos

Me gusta recrearme en mi pasado y defectos, me arrepiento de muchas cosas y siempre me centro en satisfacer a los demás. Así que para ayudarme a combatir mis inseguridades y problemas de vez en cuando me repito esta certeza:
Hago lo que puedo y que sea lo que dios quiera.

Esta frase consigue:
1. Ocupar mi mente con algo bastante neutro y breve. Es fácil de memorizar.
2. Refuerzo la idea de que soy yo el único que conoce mis circunstancias y mis capacidades.
3. Hablándome en primera persona recuerdo mis capacidades: en mis circunstancias pongo todo el esfuerzo que tengo disponible, no necesito justificarme ante nadie, ni sentirme mal por lo que piensen otros.
4. Hago lo que puedo, y esa es mi elección. No hago lo que debería, ni lo que se me pide, y así no me dejo llevar por lo que otros puedan querer o pensar. Puedo decidir lo que hago, no debo de sentirme mal por hacer uso de mi libertad.
5. Las consecuencias de lo que hago no están en mi control. No debo sentirme humillado o sentir miedo si algo sale mal, siempre puedo pedir pedón, seguir mejorando, y enmendar aquello que hice mal. Así son las cosas, tengo que aceptar que puedo cometer errores. Es así como se aprende.
6. El punto anterior implica que también acepto los errores de los demás, no soy especial.
6. Las personas normales y funcionales se preocupan primero de ellas mismas. Porqué preocuparse de lo que piensen otros si yo mismo no puedo controlar mis pensamientos? Si olvido que mi prioridad soy yo no podré juzgarme de forma justa. Soy yo el autor de mis acciones y el que hace lo que puede.
6. Sucederá lo que dicte el destino y la incertidumbre... Ocurren tantas otras cosas que se me escapan que no necesito preocuparme por temas que esten fuera de mi alcance.
7. Creo saber lo que piensa la gente constántemente pero lo cierto es que nadie conoce lo que piensan otras personas. Mucho menos algo tan complejo como las consecuencias y reacciones de nuestros actos. Lo que hacen otros, está fuera de mi control. Si soy justo con los demás y no asumo nada de ellos podré tomarlos como ejemplo, para lo que debo y no debo hacer.
7. Mis dudas e inseguridades son extraordinarias. Me preocupo por las pequeñas cosas del día a día en exceso, pero es necesario comparar mis problemas, vicios y defectos con la grandeza del tiempo y el cosmos. Somo diminutos respecto a todo. Recordar eso ayuda a relativizar todos mis males.
8. Mencionar a dios me da seguridad pues no tengo que distraerme de lo práctico y mundano. No soy religioso pero da comfort pensar que fuimos creados de una forma, y que heredamos ciertas características de nuestros padres y creadores. De esta forma uno no puede mas que aspirar a centrarse en las cualidades que uno admira, lo divino e incomprensible. Eso deberá ayudar a centrarse en sus virtudes personales para liberarse de todo lo negativo.

Olé! Excelente análisis.

Coincido con anarosa, muy bien, Athos.
En mi caso hago lo que creo que para mí está bien, sin dañar a los demás y no importarme por lo que piensen de mí.