Pisantrofobia: cuando tienes miedo a confiar

La mayoría de nosotros hemos sufrido alguna vez un desengaño amoroso o una traición de un amigo o un familiar. Y todos hemos experimentado la dificultad de volver a depositar nuestra confianza en esa persona. De por sí, confiar no es tarea sencilla, pero si además padeces pisantrofobia, esta labor se convierte en una auténtica quimera.

La confianza no es gratis y queda emborronada por los precipicios cuando en ella se buscan puntos intermedios: o se tiene o no se tiene. Es fruto de meses y años de relaciones y experiencias compartidas. Sabemos que tardamos mucho en ganárnosla, pero muy poco en perderla. Pero también dicen que lo último que se pierde es la esperanza y que el tiempo lo cura (casi) todo.

¿Qué es la pisantrofobia?
La persona que padece pisantrofobia se caracteriza por un miedo irracional a establecer una relación íntima y personal con los demás. Las experiencias traumáticas o dañinas que ha vivido anteriormente la han marcado tanto que el miedo supera a las ganas de depositar su confianza en otras personas.

Quienes la padecen comienzan a presentir que todo el mundo tarde o temprano les decepcionará o traicionará. Van convirtiéndose en personas extremadamente desconfiadas. Sienten temor ante la idea de que la situación pueda volver a repetirse y no dan a pie a que exista ni la más mínima posibilidad de revivirla.

“¿Por qué siempre me pasa a mí?”. “No voy a ser feliz nunca”. “Siempre estaré solo”. Son algunas de las frases sobre las que vuelven una y otra vez como diagnóstico de una situación que les genera una gran impotencia: esa que da el querer, pero no poder. Por eso, junto a la desconfianza, también sienten desilusión, frustración, tristeza, enfado, culpa o vergüenza generalizada.

Conductas que desarrolla el pisantrofóbico
Nadie quiere sufrir, pero si perdemos la confianza, perdemos la base esencial de cualquier relación interpersonal. Las consecuencias de los que sufren pisantrofobia no se limitan solo al  plano afectivo, sino que se transfieren al resto de ámbitos de su vida: el laboral, el familiar, el relativo a la pareja o el socio-cultural.

Sus autosugestiones les llevan a realizar comportamientos antisociales y aislacionistas que afectan a todos estos entornos. Algunos de estas conductas son:

• Evitar realizar actividades que suponen tener un contacto cercano interpersonal. Su retraimiento es fruto de su miedo a las críticas, un temor exagerado a ser juzgado, al rechazo o a la traición.
  

• No acudir a eventos o encuentros en los que ha de juntarse con personas desconocidas y no está seguro de que va a caer bien a los demás.
  

• No tomar ningún tipo de riesgo que pueda poner en peligro su plano emocional. Se muestra muy reacio a comprometerse afectivamente con el resto de personas. Sienten pavor a abrirse a los demás. Por eso, en ocasiones tiende a ser considerada como una persona solitaria, introvertida, reservada y hermética.
  

• Tratar de evitar mantener relaciones íntimas debido al miedo a ser decepcionado de nuevo. No quiere volver a encontrar pareja, por su pánico a que le fallen otra vez.
  

Todas estas repercusiones aumentan su intensidad de manera exponencial cuanto más involucrado emocionalmente está el pisantrofóbico con la otra persona.

La falta de confianza también es propia

Normalmente, las dificultades para confiar en los demás parten de una desconfianza en uno mismo. Esta desconfianza afecta directamente a esa intuición o sexto sentido que nos dicta si una persona es de fiar o no lo es. Las personas con pisantrofobia no es que carezcan de esta intuición, lo que sucede es que no confían nada en su capacidad para acertar. Por otro lado, las personas sin pisantrofobia no es que no sepan que esta intuición se equivoca, pero no les causa pánico el hecho de que pueda hacerlo y por lo tanto se fían de su criterio a falta de otro mejor.

Esta falta de confianza en la intuición suele disminuir la confianza también en otras habilidades, como la de defendernos si alguien nos ataca. Así, al pensar que estamos más indefensos todavía nos volveremos más desconfiados. De esta manera el círculo se cierra y la «fobia» cada vez se vuelve más limitante.

Construir en este contexto un vínculo afectivo con otra persona se vuelve una tarea muy difícil, algo parecido a intentar escalar una montaña muy alta cuando tenemos vértigo. El miedo a caer aumenta con cada paso que damos, hasta que en tamaño e intensidad supera a la ilusión por seguir adelante. Por eso muchas personas con pisantrofobia cortan de manera brusca las relaciones: sus fuerzas no son las suficientes como para seguir escalando, profundizando en esa relación, y que el vértigo se dispare.


Acudir a terapia: el mejor paso que podemos dar

La confianza no vuelve de la noche a la mañana, ni en uno mismo ni como tendencia para ser depositada en los demás. Por ello, para superar la pisantrofobia es importante buscar ayuda. El psicólogo puede ayudarnos a que nos recuperarnos de aquello que nos ha herido emocional y anímicamente. Así, atacando la causa, es probable que el problema se resuelva también.

• Construir un buen proceso de duelo es vital si se quiere volver a confiar de nuevo. Para ello, es necesario aceptar el dolor que sentimos y no huir de nuestros sentimientos. Tampoco conviene minimizar el problema o mirar para otro lado.
  

• Requiere tiempo y descanso. Tus emociones se tienen que estabilizar, por lo que no es buena idea comenzar una nueva relación. Además de apresurado, lo más probable es que aún no estés preparado para volver a confiar en nadie y que resurjan traumas pasados.
  

• Afrontar situaciones cotidianas que necesitan de la confianza en el otro. Por ejemplo, delegar algunas tareas en la pareja que nos permitan aumentar la seguridad en él paulatinamente, hacer actividades conjuntas o naturalizar el trastorno.
  

Volver a confiar en otra persona, además de ser un auténtico desafío, también es una necesidad vital. La confianza que mantenemos en personas cercanas tiene múltiples beneficios. Entre ellos, aumenta nuestra felicidad y la seguridad en nosotros mismos, permitiendo que afrontemos mejor los problemas y disminuyendo el estrés. Sin duda, lo valioso del objetivo hace que volver a intentarlo merece la pena.

Fuente: [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]

Bien el copy/paste, malísima la edición -.-

Me sentí identificado con esto que leí hoy, quería compartirlo.

[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo] a día de hoy yo también me siento 100% identificado

En algunas cosas me cuesta confiar pero no diría que es una fobia ni mucho menos. Creo que un cierto grado de desconfianza es hasta positivo y también aceptar que en esta vida, hasta la persona en la que más confías te puede fallar. Pero no lo digo como algo derrotista o fatalista, es no idealizar en exceso a una persona, porque luega no se ajusta a lo que esperamos de ella, y no tiene por qué ser culpa de esa persona. Lo que entendemos como que alguien nos falla es relativo, habría que ver la intencionalidad, la reiteración, si lo que ha hecho es realmente tan grave o no... Vamos, que hay que aceptar que todos somos humanos y no esperar que nunca nos vayan a decepcionar, hay que confiar al mismo tiempo que hay que ser un poco realista.

No sabía que eso podría ser una fobia, pero nada, otra fobia más para el carro
Aunque yo en la intuición si que confío mucho, nunca me falla

a veces me da la impresión que tuviese todas estas cosas

pero esto no aparece en el DSM-V

Pues yo creo que es la conclusión lógica y una medida de supervivencia. No confío en los demás; pero es que me demuestran que no puedo confiar.
Un ejemplo: Sales de casa y el vecino te da un guantazo todos los días a las 8 cuando vas a trabajar, a los dos años te pregunta -¿por qué no hablas? -qué te hice yo!.
No sé, creo que es natural que no te quieras entender con él. Si tenemos que ser idiotas y tragar todo para ser normales, prefiero ser un anormal.

Normalmente cuando he conocido a alguien exageradamente desconfiado es porque teme que le hagan lo que él hace (o querría hacer si no fuese tan impotente).

Sander escribió:Normalmente cuando he conocido a alguien exageradamente desconfiado es porque teme que le hagan lo que él hace (o querría hacer si no fuese tan impotente).

 Tambien suele pasar que quien juzga a los demás y cree ser mejor, no lo es.

No sé qué tiene que ver eso con el tema de Anakin. La gente con inseguridades termina proyectándolas a los demás. Los bullies proyectan su propia vulnerabilidad en los que son más débiles . La gente con baja autoestima que no está a gusto con su personalidad cree que los demás piensan igual y le van a tratar como él cree que se merece, así que no confía. (También hay otros que lo hacen por traumas).
No puedo hablar por todo el mundo, pero cuando era más desconfiado no era capaz de tener una relación íntima con nadie, sino que los apartaba para que no me hicieran daño. Por no hablar de que tener ideas de que la gente que te rodea va a hacerte daño en cualquier momento, sin pruebas, no es forma de vivir.

Sander escribió:No sé qué tiene que ver eso con el tema de Anakin. La gente con inseguridades termina proyectándolas a los demás. Los bullies proyectan sus inseguridades en los débiles. La gente con baja autoestima que no está a gusto con su personalidad cree que los demás piensan igual y le van a tratar como él cree que se merece, así que no confía. (También hay otros que lo hacen por traumas).
No puedo hablar por todo el mundo, pero cuando era más desconfiado no era capaz de tener una relación íntima con nadie, sino que los apartaba para que no me hicieran daño. Por no hablar de que tener ideas de que la gente que te rodea va a hacerte daño en cualquier momento, sin pruebas, no es forma de vivir.

Vale, pues me explico:

Decias en el comentario anterior Normalmente cuando he conocido a alguien exageradamente desconfiado es porque teme que le hagan lo que él hace (o querría hacer si no fuese tan impotente). Pero solo tienes que ver a una animal maltratado, que nunca hizo nada malo a nadie; pero que después de ese trato teme al ser humano en general. Las personas que hemos sufrido ciertas cosas, nos sentimos igual. No implica para nada que una persona que teme, sea mala con los demás. Aunque en realidad no suelo ser muy desconfiado con nadie, pero me pareció ese comentario un poco desacertado.

Y supongo que me anterior respuesta tiene tanto sentido como el que yo le quise dar. No creo que tengamos que ser tan exclusivos y ceñidos a lo que una persona, o varias crean que  es lo correcto.

Pues yo he de decir que hasta los 17-18 años no tenía éste problema, pero desde que caí en una depresión fuerte hace ya varios años dejé de confiar en todo el mundo ya nunca he vuelto a tener ninguna relación cercana y personal con absolutamente nadie (más allá de familiares muy cercanos).

Me siento muy identificado con ésta fobia, últimamente estoy trabajando mucho por cambiar éste tipo de conductas irraconales porque me generan un malestar tremendo cuando después soy consciente de las conductas tan irracionales que tomo con tal de evitar tener relaciones personales y confianza en otras personas. Es algo muy irracional y requiere de muchísimo esfuerzo y fuerza de voluntad superarlo, yo todavía estoy en ello...
De todas formas yo no creo que se trate de una fobia concreta sino más bien una consecuencia de tener mucha ansiedad y de la fobia social.

Yo he sufrido desengaño amoroso hasta estando en una relación abierta. Es que me meo.

Hace unos años confiaba demasiado en la gente, y ahora es al revés. Confío en mí mismo a tope, pero en los demás.. pues regulín.

En cambio, la gente confía en mí super rápido. En seguida me cuentan secretos y cosas muy íntimas que casi nadie más sabe... Muy irónico todo.

Sumerio escribió:

Sander escribió:No sé qué tiene que ver eso con el tema de Anakin. La gente con inseguridades termina proyectándolas a los demás. Los bullies proyectan sus inseguridades en los débiles. La gente con baja autoestima que no está a gusto con su personalidad cree que los demás piensan igual y le van a tratar como él cree que se merece, así que no confía. (También hay otros que lo hacen por traumas).
No puedo hablar por todo el mundo, pero cuando era más desconfiado no era capaz de tener una relación íntima con nadie, sino que los apartaba para que no me hicieran daño. Por no hablar de que tener ideas de que la gente que te rodea va a hacerte daño en cualquier momento, sin pruebas, no es forma de vivir.

Vale, pues me explico:

Decias en el comentario anterior Normalmente cuando he conocido a alguien exageradamente desconfiado es porque teme que le hagan lo que él hace (o querría hacer si no fuese tan impotente). Pero solo tienes que ver a una animal maltratado, que nunca hizo nada malo a nadie; pero que después de ese trato  teme al ser humano en general. Las personas que hemos sufrido ciertas cosas, nos sentimos igual. No implica para nada que una persona que teme, sea mala con los demás. Aunque en realidad no suelo ser muy desconfiado con nadie, pero me pareció ese comentario un poco desacertado.

Y supongo que me anterior respuesta tiene tanto sentido como el que yo le quise dar. No creo que tengamos que ser tan exclusivos y ceñidos a lo que una persona, o varias crean que  es lo correcto.

Lo siento, pero después de ver miles de animales a las puertas del matadero, dudo mucho que la desconfianza de un animal no humano sea necesariamente por el trato que haya recibido. Es más probable que se deba a su personalidad. Aunque estoy de acuerdo en que confiar y ser alguien de confianza no tienen nada que ver y que sí se cumple que es parte de la personalidad y no de cómo ese animal (humano o no) vaya a actuar.

Además es imposible saber si alguien confía en nosotros o no. Incluso si nos lo comunica, puede o mentir o no ser tan consciente de sus sentimientos hacia nosotros como creía. Tendremos que confiar en que confían en nosotros.

Hmm, nunca había leído sobre esta fobia. Me atrevo a decir que una traición fue lo que me provocó la fobia social.
Al principio me puse muy distante y cortante con la gente, no hice vínculos emocionales con nadie, mis problemas emocionales e inseguridades se acrecentaron al doble y el resto es historia.

Mis niveles de desconfianza siguen presentes en mi vida, y fuera de mi círculo familiar cualquier acto de buena voluntad que haga una persona hacia mí lo veo con recelo. ¿Que me regalan algo para comer? ¡Seguro lo envenenaron!

Gracias por compartir, no habría estado al tanto de esto. Debo recuperar mi confianza

mattwuur escribió:

Sumerio escribió:

Sander escribió:No sé qué tiene que ver eso con el tema de Anakin. La gente con inseguridades termina proyectándolas a los demás. Los bullies proyectan sus inseguridades en los débiles. La gente con baja autoestima que no está a gusto con su personalidad cree que los demás piensan igual y le van a tratar como él cree que se merece, así que no confía. (También hay otros que lo hacen por traumas).
No puedo hablar por todo el mundo, pero cuando era más desconfiado no era capaz de tener una relación íntima con nadie, sino que los apartaba para que no me hicieran daño. Por no hablar de que tener ideas de que la gente que te rodea va a hacerte daño en cualquier momento, sin pruebas, no es forma de vivir.

Vale, pues me explico:

Decias en el comentario anterior Normalmente cuando he conocido a alguien exageradamente desconfiado es porque teme que le hagan lo que él hace (o querría hacer si no fuese tan impotente). Pero solo tienes que ver a una animal maltratado, que nunca hizo nada malo a nadie; pero que después de ese trato  teme al ser humano en general. Las personas que hemos sufrido ciertas cosas, nos sentimos igual. No implica para nada que una persona que teme, sea mala con los demás. Aunque en realidad no suelo ser muy desconfiado con nadie, pero me pareció ese comentario un poco desacertado.

Y supongo que me anterior respuesta tiene tanto sentido como el que yo le quise dar. No creo que tengamos que ser tan exclusivos y ceñidos a lo que una persona, o varias crean que  es lo correcto.

Lo siento, pero después de ver miles de animales a las puertas del matadero, dudo mucho que la desconfianza de un animal no humano sea necesariamente por el trato que haya recibido. Es más probable que se deba a su personalidad. Aunque estoy de acuerdo en que confiar y ser alguien de confianza no tienen nada que ver y que sí se cumple que es parte de la personalidad y no de cómo ese animal (humano o no) vaya a actuar.

Además es imposible saber si alguien confía en nosotros o no. Incluso si nos lo comunica, puede o mentir o no ser tan consciente de sus sentimientos hacia nosotros como creía. Tendremos que confiar en que confían en nosotros.

Bueno, es que vivo y he vivido más de media vida en los pueblos, rodeado de animales. No es lo mismo  un animal desconfiado por naturaleza, y uno al que se la trata mal. Creo que todos hemos visto a una animal maltratado que se encoge de miedo, y mira con desconfianza a todo el que se le acerca.  Si me dices que eso es natural en un animal, no entiendo muy bien a que te refieres.

No hablo de gente mansa, de esa gente vulnerable que es esquiva al principio, pero que responde a las muestras de confianza con confianza. Mi mensaje iba por esos que alevosamente demonizan a la gente de su entorno sin conocerlos para así poder decirse que no valía la pena confiar en ellos de todos modos, cuando lo que en realidad pasa es que no quieren exponer sus vulnerabilidades porque no están acostumbrados o se sienten ridículos. Los demonizan por cosas superficiales como sus gustos, su estrato social, la cantidad de fotos que suben, la forma en que visten o el volumen al que hablan (sobran ejemplos en el foro); son un reflejo de las actitudes y la gente que otrora les hicieron pasar mal... Imaginaos vivir con un tirano así.

[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo] Ahora si te entiendo, estoy de acuerdo totalmente contigo.

Tienes razón, en los comentarios se perfectamente el reflejo de la persona. Me quedo con ese grupito que busca ayudar y respeta al resto.

Quizá sea algo extremista llamarlo fobia, bah según el caso, tampoco se trata de un autodiagnóstico. Mi caso en el momento que me encontré con ese artículo y lo copié acá fue más bien el post muro fs lo que sentí (por ponerle un nombre, o trasladar el mismo término que se usa en otras cosas a esto), que fue el querer mostrarme sociable en un ambiente nuevo, y darme cuenta que en realidad tenía mecanismos de defensa todo el tiempo, que desconocía y no veía como es lógico en los que me acompañaban, sin mucho misterio sería como notar la falta de habilidades sociales después de haberme creído "curado" como si las secuelas del aislamiento no existieran, y eso desembocó en una mala experiencia que no contaré, pero fue mas o menos el intentar buscar las causas que di con el artículo y me vi identificado. Supongo que más allá de donde uno empieze a buscar cambiar se va encontrando con obstáculos y si es una fobia o no, mejor verlo como eso, algo a superar, que para el diagnóstico están los profesionales.
Gracias [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo] por contestar.

Nunca había oído esa palabra. Siempre he tenido miedo a abrirme a los demás porque las experiencias que he tenido han sido bastante malas en su mayoría y en muy poquitos casos han salido bien.
Intento recordar esos poquitos casos en los que la cosa salió bien para confiar más en los demás aunque es muy frustrante que en la mayoría de los casos no sea así y jueguen con tus sentimientos. Lo que está claro es que si no confías en nadie, nadie confiará en ti (o muy raramente) y estarás perdiendo oportunidades y haciéndote daño a ti mismo.