Haces lo que te propones?

Una de las mejores maneras de asegurar el éxito y verdaderamente te vayas acercando hacia todos los resultados que deseas, es tomando acción.

Realmente llevando a cabo las cosas que te propones.

Sin embargo, una cosa es decirlo y otra cosa es hacerlo, especialmente todos los días, consistentemente, con persistencia.

Por eso algunos hábitos pueden ayudar a que lo que te propongas lo vayas logrando pero recuerda que todo es paso a paso.

#1: Divide y venceras

Piensa en cual es el paso que quieres dar, qué requiere, qué acciones hay que tomar, qué actividades debes llevar a cabo, qué tareas se requieren de tu parte, algunas agradables, otras no tanto.

Aquellas actividades que haya que realizar y que de alguna manera sean complejas, difíciles, grandes o que te detengan y te desmotiven.

¿Cómo podrías dividirlas de manera que no tengas que llevar a cabo algo grande y complejo?

Por ejemplo si hablamos de escribir un libro, que no sea escribir un capítulo entero...

Sino por ejemplo empezar escribiendo media hora, y hacer una pausa.

O empezar escribiendo al menos la primera hoja.

Cualquiera que sea el tipo de actividad, casi siempre es posible pensar en una estrategia de división

Hay quienes dicen que arrancar es lo mas dificil.

#2: Disciplina China

En muchas ocasiones puedes estar desmotivado, desanimado, no quieres tomar acción, caes incluso cerca de la depresión o en la depresión misma, porque no tenemos en mente ni la estrategia ni el habito que nos ayude a tomar acción de donde queremos ir paso a paso.

Al identificar los beneficios de sentirte algo mejor, alcanzas esa consistencia
que se traduce en disciplina.

#3: Compartido es mejor

Hablar de lo que queremos o de lo que hacemos es beneficioso, lo que nos falta a veces es la comunicación y el impulso positivo del trato con otras personas.

#4: Divertido es mejor

En muchas ocasiones, las cosas que hacemos a diario son aburridas.
Muchas veces nuestro cerebro esta demasiado sobrecargado, pensando en mil cosas, haciendo de todo, todos los días y hay que reiniciarlo cuando no vemos progreso, no vemos que haya rendimiento, seguramente el tedio ha consumido tu RAM,
simplemente no hay entretenimiento, no hay diversión, no hay nada que consideremos positivo inherente en estas cosas.

Una de las cosas que poder hacer es aportar creatividad, darle un giro o un cambio que haga las cosas un poco menos aburridas.

La diversión es un alimento importante, por eso, añade un poco de diversión y pinta lo gris en la medida de lo posible.

#5: Fijate un objetivo y celebralo

Este es quiza el hábito más importante de todos, tomar en consideración un logro y celebrarlo.
Seguramente has oido hablar del "mal del ejecutivo" y es por el tema mencionado anteriormente, estan saturados y viven en el tedio,
no celebran lo que consiguen.

Si es un logro pequeño, no vamos a tirar la casa por la ventana pero si podemos darnos un detalle.

Si es un logro grande, verdaderamente debemos retroalimentar nuestra mente con la satisfacción.

Tenemos que alimentar a nuestra mente con recompensas y con premios acordes al nivel de logro,
porque de lo contrario entraremos en la rutina y será difícil que tu mente se enfoque de motivación y sienta el deseo de llevar a cabo más cosas.

Estoy de acuerdo con todos los puntos pero no estoy tan seguro con el tercero. Dicen que si quieres que algo te salga bien, no debes decírselo a nadie. Así no te desanimarán ni te lo estropearán. Supongo que depende del ambiente en el que nos desenvolvamos y las personas que nos rodean.

yo antes me proponia hacer cosas pero claro que antes mi vida era distinta.

¿Haces lo que te propones? NO, muchas veces ni lo intento por que se no voy a poder

Me he pasado la vida haciendo lo que me propongo para que luego todo se destruya por un evento del azar incontrolable y al final no lo pueda disfrutar. Ahora por fin aprendí la lección y me dedico a hacer lo que me gusta, y si puedo disfrutar de algo a pesar de los dolores, genial.

Creo que lo importante es ponerse objetivos realistas e ir de menos a más. A mi me pasa que muchas veces tiendo a querer hacer algo que se me queda grande porque parece que quiero llegar a la "meta" sin recorrer el camino y claro, se me cae el mundo encima

No importa el ayer, no importa el mañana, únicamente importe el hoy para hacer lo te propones.

Si es algo que realmente me interesa como por ejemplo el currar duro y ahorrar para algo en concreto o hacer algun deporte si, lo logro. Ahora si es algo impuesto como por ejemplo estudiar algo que no me gusta/convence, ir a ver a alguien por compromiso, socializar si no quiero etc no.
Cuando realmente quiero puedo hacer casi cualquier cosa ya que estoy motivado si esa motivación no se presenta dejo todo a medias o ni lo intento.
Por eso me gusta vivir solo, uno se da caprichos propios y solo tiene que velar por cuenta propia, no decepcionas a nadie, nadie te reclama nada y lo mejor es que la ansiedad casi no existe.

Uno de mis mayores defectos es que soy esclavo de la gratificación inmediata y obedezco a mis impulsos en vez de pensar en el futuro. Esto me ha traído muchos beneficios en el plano amoroso y de amistad, pero en cuanto a otros objetivos personales y económicos me ha perjudicado bastante.

Si, esta bien intentar cumplir con lo propuesto, y mas si eso puede mejorar tu situacion
Aunque yo a veces no lo consigo, sobre todo en lo de hacer deporte

No, ya no me importa mucho. Ahora estoy en otra etapa que prefiero disfrutar

Normalmente no, así que como me conozco, no me propongo nada y no me decepciono a mí misma.

Sí suelo hacerlo, aunque también reconozco que abandono cosas que me propuse hacer, las he empezado y las he dejado en el camino, pero suelen ser cosas menos importantes y que podría retomar en cualquier momento. En cambio, las más importantes siempre las termino haciendo sin abandono.

Pero en general procedo con una combinación de metas que me planteo, empiezo y termino, metas que empiezo y abandono y metas que me digo que quiero hacer y retraso una y otra vez. Sin embargo, siempre estoy haciendo algo que considere productivo, combinado con momentos de dejadez y entretenimiento.